Juan Manuel Montilla, conocido popularmente con el sobrenombre de El Langui, regresó ayer de nuevo a Vila-real para protagonizar la iniciativa organizada por Aludme, con la colaboración del Ayuntamiento, para recaudar fondos para esta asociación con el objetivo de destinarlos a la lucha contra la distonía mioclónica.

Pero además, el evento se transforma en un grito para acabar contra el acoso escolar. Y es ahí donde El Langui y su equipo pusieron su granito de arena, a través de la escenificación de su campaña Se buscan valientes, que se desarrolló por la mañana en el colegio Escultor Ortells, ante la presencia de 1.600 escolares de los colegios de la ciudad, acompañados por un buen número de maestros. El propósito no es otro que el de «favorecer la concienciación contra el bullying».

El actor y cantante madrileño instó a los presentes a «remar todos hacia el mismo lugar para hacer fuerza y ayudar a las minorías, como pasa con los afectados por enfermedades raras». Y apuntó que «hay que generar empatía hacia los demás en esta sociedad actual de postureo, de estereotipos y de aparentar que funcionamos bien». Una mención que realizó en referencia a los niños y jóvenes que sufren acoso. Un acoso que, dijo, «hay que visibilizar y eso es lo que se intenta con la campaña» que llevan a cabo.

REFERENTES // Asimismo, Montilla hizo hincapié en la importancia de que los más jóvenes tengan referentes, como es su caso, «que puedan romper los parámetros para que nadie deje de perseguir sus sueños por tener capacidades o condiciones diferentes».

Ovaciones y gritos de la chiquillería fueron la nota dominante en el recibimiento de El Langui en el patio del colegio Escultor Ortells, en un acto en el que tampoco faltaron la directora del centro, Lucía Tarjuelo; el concejal de Servicios Sociales, Álvaro Escorihuela; y la presidenta de la asociación Aludme, Marina Martín.

Moreno aprovechó la ocasión para explicar su experiencia de vida y para reafirmar que si no sufrió acoso en su niñez y su juventud es «porque estaba rodeado de valientes». Precisamente, la interpretación de la canción Se buscan valientes se convirtió en el momento más álgido de la mañana, con cientos de voces coreando la pegadiza melodía.

Tras la actuación, el equipo de la campaña Nada será igual subió al escenario para responder a las preguntas que les lanzaban los alumnos vila-realenses que acudieron a una cita, en la que no faltó el intenso calor que tuvieron que aguantar los niños.