La Policía Local de Vila-real ha concluido la campaña de vigilancia y control del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil (SRI) en los coches, que se ha desarrollado entre el 12 y el 18 de septiembre, y que se ha saldado con una decena de denuncias a conductores y pasajeros.

A lo largo de seis días han sido 822 los conductores de vehículos inspeccionados, así como 204 pasajeros y 13 ocupantes en SRI, lo que suma un total de 1.039 inspeccionados por la Unidad de Tráfico de la Policía Local, de los que una decena circulaban sin el correspondiente sistema de retención: siete conductores y dos pasajeros adultos, así como también un niño.

“Menos de un 1% de los ocupantes de los vehículos ha sido sancionado, pero nuestra obligación es insistir en lanzar el mensaje de que el cinturón de seguridad es un seguro de vida”, apunta el edil de Seguridad Ciudadana, Javier Serralvo, quien recuerda que la multa alcanza 200 euros y resta tres puntos del carné. H