De Menorca, pero sin amor. Así han llegado en las últimas semanas mensajes a dos miembros de la Colla Gegantera de Vila-real, Pasqual Sebastià y Carlos Chiva, en los que se les lanzan advertencias, a través de Facebook, después de afianzar la relación de la entidad vila-realense con la Colla de Sant Lluís y Llucmaçanes.

Y es que miembros de esta entidad menorquina llevan desde el pasado mes de septiembre recibiendo serias amenazas de un desconocido que, en diferentes ocasiones, “cambia su nombre para dificultar que se conozca quién es, aunque se sospecha que se trata de uno o varios integrantes de una asociación de un pueblo vecino, según parece por envidia por la mucha actividad que generan los de Llucmaçanes”, explica Sebastià a Mediterráneo.

Unas sospechas que todavía están por confirmar, por cuanto la Guardia Civil está llevando a cabo las pesquisas para identificar al autor o autores de estas advertencias, que incluso han llegado a tomar la forma de amenazas de muerte, con mensajes que incluían imágenes de un hombre ahorcado, de una cabeza arrancada del cuerpo, de una soga, de ataúdes, de nichos de cementerio o de un cuerpo tendido en la carretera y tapado con una manta al que no dudaron en añadir: “El próximo puedes ser tu”.

Sebastià asegura que “se ha llegado al extremo de proferir amenazas a menores y también uno de los afectados ha requerido los servicios de un psicólogo por este asunto tan desagradable”.

El caso ha llegado a tal punto que incluso ha sido foco de interés informativo en medios escritos locales y también en el noticiario de la Televisió de les Illes Balears, donde se mencionó que las recriminaciones alcanzan a geganters de Vila-real y Benicarló.

COMUNICADO // Ante esta situación, la Colla Gegantera de Vila-real ha hecho público un comunicado en que muestran su apoyo a sus compañeros de Sant Lluís y Llucmaçanes. “Es triste, pero es hora de hacerlo público, de decir basta; las collas de Vila-real y Benicarló tenemos la suerte de que el acoso es solo cibernético, porque las personas que lo hacen son de Menorca, pero los miembros de Sant Lluís y Llucmaçanes lo están pasando mal, simplemente, por rivalidades infantiles y olvidando que los gegants son elementos para la fiesta, para hacer reír a los grandes y a los pequeños”. H