El Consorcio del Paisaje Protegido del río Millars intensifica la vigilancia para evitar el riesgo que supone bañarse en los tres assuts existentes dentro del tramo de la desembocadura tras detectar la presencia de jóvenes en alguno de estos espacios. Se trata del de Vila-real --también conocido como Els Matxos--, localizado en el paraje del Termet; el comunitario de Santa Quitèria; y el antiguo azud de Burriana, ubicado en la zona de les Revalladores y construido entre los términos de Vila-real y Almassora.

Desde el organismo que gestiona el paisaje protegido insisten en la «alta peligrosidad» de nadar en estas infraestructuras. Y recuerdan el fatal accidente acaecido en agosto del 2016, cuando un joven de 19 años se ahogó en Els Matxos de Vila-real. Y hacen hincapié en que los recintos están «perfectamente señalizados mediante cartelería». Y es que la guardería del ente se ve desbordada durante los últimos días por la gran afluencia de personas que acude a bañarse, obviando la prohibición de acceder a ellos y el riesgo que representa.

«En las horas centrales del día, tanto antes de comer como durante la tarde, la afluencia es importante y durante las rondas que realizamos a lo largo del día nos toca sacar a mucha gente y les informamos de lo peligroso que es bañarse allí, a la vez que les indicamos otras zonas menos peligrosas del Millars para refrescarse», indica el guarda rural del consorcio Javier Rodríguez.