La programación de actividades estivales organizadas por el Ayuntamiento de Vila-real para sacar mayor rendimiento al recurso natural del paraje del Termet está obteniendo una destacada respuesta de público este ejercicio. Entre todas las propuestas, una de las más populares es la de las sesiones de Ball al Termet.

La concejala que coordina esta iniciativa, Rosario Royo, aseguró ayer que la participación es tan significativa como la de las dos ediciones anteriores, lo que demuestra el acierto no solo de proponer su organización, sino también mantenerla un verano más.

Esta invitación al baile tiene varios alicientes para los participantes potenciales. Por un lado, que las clases prácticas son gratuitas, por lo que se trata de una actividad accesible para cualquiera; y por otro, que los estilos son muy variados, de manera que los usuarios pueden aprender o perfeccionar la cadencia propia del pasodoble o el tango, así como otros ritmos más animados, como la salsa o la bachata.

Royo recordó que el Club Azahar se encarga de organizar las sesiones, que se desarrollan todos los martes y domingos hasta finales del mes de agosto. De hecho, la edila indicó que todas las actividades estivales se clausuran coincidiendo con una fecha emblemática para la ciudad: el traslado de la Mare de Déu de Gràcia, que se convierte en el anuncio del final de la temporada estival y el regreso a la ciudad.