El alcalde de Vila-real, José Benlloch, ya negocia con los propietarios afectados por resoluciones del Jurado de Expropiación referentes a operaciones urbanísticas derivadas de los años de gobierno del Partido Popular. El objetivo es llegar a acuerdos con los propietarios, que garanticen el «necesario equilibrio entre pagar lo que se debe y prestar los servicios que requiere una ciudad como esta, en defensa del interés general», argumenta el munícipe.

En estos momentos, el consistorio tiene encima de la mesa reclamaciones de damnificados por valor de 18 millones de euros, en dos paquetes valorados por los técnicos municipales en torno a los 4,3 millones de euros.

En su mayoría, son acciones realizadas entre los años 1996 y 2011, bajo mandato del PP, relacionadas con infraestructuras como la avenida Francia, la apertura de calles, el colegio José Soriano o el jardín Jaume I. A estas cantidades, además, se le añadirán a final de año otros 9,4 millones que demandan los perjudicados en un tercer paquete y la materialización del convenio de las Dominicas, firmado por los populares el 1 de junio del 2011.

conversaciones // Una vez aprobado el presupuesto del 2018, con el préstamo firmado y el plan económico financiero ratificado en el pasado pleno, tal y como se comprometió, el alcalde abre las conversaciones con los representantes de los dueños afectados. «El objetivo es pagar y, dentro de las posibilidades, cumplir con las resoluciones, las sentencias y los diferentes convenios, siempre garantizando la viabilidad económica», según el primer edil.

«La negociación con los propietarios va en el sentido de conjugar el cumplimiento de las obligaciones con la prestación de servicios públicos esenciales, mejorar la calidad de vida, invertir en las personas y generar oportunidades», concreta el alcalde.

Benlloch apunta que el «difícil equilibrio» procede del 2011. «En siete años, hemos trabajado con responsabilidad y prudencia, abonando más de 25 millones de euros entre préstamos y empastres urbanísticos del PP. Pese a eso, hemos consolidado un proyecto de municipio competitivo, innovador y de progreso», señala.

OFERTA // El responsable municipal advierte de que «no hay dinero para todos». «Si tuviéramos que pagar toda la herencia de golpe, quebraríamos», detalla. Así, el Ayuntamiento ofrece soluciones bajo tres criterios fundamentales: la aceptación por parte de los propietarios de la valoración municipal, la renuncia a los intereses y la dejación formal a pleitear contra el consistorio, retirando los recursos contra la valoración técnica. «Los ciudadanos que se acojan a todas estas premisas, cobrarán de forma inmediata», concluye el munícipe.