Los clubs de gimnasia rítmica Aitana y Vila-real, el de boxeo, el de karate y Vilaesport (fútbol sala) serán los usuarios habituales del nuevo pabellón Campió Joan Baptista Llorens, que el consistorio prevé poner en marcha en septiembre, dentro de la nueva campaña del Servei Municipal d’Esports (SME).

Así lo indicaron fuentes del departamento, tras la visita oficial a las nuevas instalaciones y que encabezaron el alcalde, José Benlloch; y el presidente del Villarreal CF, Fernando Roig, así como el responsable de la orden de los Padres Carmelitas en Vila-real, David Oliver; y los ediles de Deportes y de Territorio, Javier Serralvo y Emilio Obiol, respectivamente.

Las mismas fuentes apuntaron que también se plantea que pueda usarse para las ligas locales y para actividades deportivas del SME puesto que las circunstancias actuales por el covid-19 requieren de espacios amplios con una ventilación adecuada. Con todo, estos flecos se cerrarán tras la reunión prevista a finales de agosto con la comunidad Carmelita para establecer los horarios de uso por parte del colegio Virgen del Carmen y el consistorio puesto que la infraestructura se ha construido en un terreno cedido por la orden.

Tras la visita, el presidente del Villarreal CF, Fernando Roig, aseveró que la ciudad «es un ejemplo» de las posibilidades que ofrece la apuesta público-privada. «Espero que esto sirva para que muchos políticos de España pierdan el miedo a este tipo de colaboración. Todo iría mejor», sentenció. El padre David Oliver, director de los Carmelitas, manifestó su satisfacción por contar con esta instalación «cuyo uso será compartido con toda la ciudad».

En el mismo sentido, el alcalde Benlloch incidió en que esa colaboración entre el consistorio, el Villarreal CF y los Padres Carmelitas «ha hecho posible que esta nueva infraestructura sea una realidad a coste cero para la ciudad».

INVITACIÓN / Por su parte, el edil Serralvo avanzó que este mes se recepcionarán las obras y, antes de la apertura, se invitará a los equipos locales y a los integrantes del Consell Local de l’Esport a conocer las instalaciones .

El edificio, que es totalmente accesible, ocupa una parcela de 3.000 m2 y ha supuesto una inversión de 1,7 millones de euros, asumidos por el club que preside Roig, en el marco del convenio suscrito con el Ayuntamiento en el 2016, que supuso el derribo del antiguo Campió Llorens y la urbanización de una plaza diáfana junto al Estadio de la Cerámica.

La planta central alberga una pista de 1.600 m2, con tres filas de gradas con capacidad -en condiciones precovid-- para 150 personas, vestuarios para equipos y árbitros y dos lavabos para el público. En la primera planta, de 500 m2, hay dos aulas polivalentes.