Todo empezó con un mensaje en Facebook que alertaba de la próxima demolición de la Alqueria de Sant Albert, o dels Frares, en la partida Carinyena, en la zona afectada por el paralizado proyecto de Espai Vila-real. Tras el interés suscitado por el texto y ante la probabilidad que se consume el derribo, Paula Menero Saborit lanzó una campaña de recogida de firmas en la plataforma Change.org en la que solicita al Ayuntamiento que extreme la vigilancia para evitar la «pérdida irreparable de este patrimonio cultural e histórico de la ciudad», así como que estudien la «realización de un plan municipal, o en colaboración con otras administraciones», que sirvan para «proteger y restaurar de forma efectiva» esta construcción. El tercer punto insta al consistorio a alertar a sus titulares de las obligaciones que estipula la normativa municipal respecto a estos inmuebles.

En la parte expositiva de la petición recogen algunas de las peculiaridades de este edificio protegido, como su origen de mediados del siglo XVIII y que fue lugar de retiro de la comunidad carmelita. Y destacan las pinturas que decoran, pese a su avanzado deterioro, algunas paredes, suelos y techo, su puerta o la capilla.

Colectivos como la Associació Cultural Socarrats informaron también que mañana, 3 de enero, a las 17.00 horas, está prevista la lectura de un manifiesto en el exterior de esta construcción centenaria en favor de su defensa.