La nueva junta de la Comissió de Penyes asumió el cargo el pasado viernes con algunos retos y dudas a resolver cara a las próximas fiestas. Una de ellas, la Cavalcada, uno de los actos más participativos de cuantos organiza el colectivo que aglutina a los peñistas, más allá de los gastronómicos.

Si este año la incertibumbre sobre el desfile festivo vino aparejada al partido del Villarreal a domicilio en el horario habitual de la Cavalcada, para las próximas fiestas en honor a Sant Pasqual hay dos factores determinantes.

El primero es el recorrido, máxime cuando está asumido que la Fira Gastronómica, que recuperó la esencia de la Fira de la Tapa en las fiestas de septiembre en honor a la Mare de Déu de Gràcia, volverá a instalarse en un tramo de la avenida la Murà, el que delimitan la avenida Cedre y la calle Ramón y Cajal. Desde la Comissió de Penyes indicaron que se valoran diversas alternativas que pasarían por finalizar en la plaza Major, bien manteniendo la salida desde el colegio Escultor Ortells o bien realizando la marcha en sentido contrario, es decir, desde la Biblioteca Universitària del Coneixement (BUC) hasta alcanzar la plaza.

Sin embargo, el edil de Fiestas, Diego Vila, se mostró partidario de acortar el recorrido. «Acabar en la plaza siempre ha sido más problemático, porque está el escenario y porque alguno de los giros --en el caso de arrancar desde la BUC, el de la calle Ramón y Cajal-- es complicado. Apostaría más bien por comenzar igualmente desde Escultor Ortells y finalizar llegados al Auditori, con lo que las carrozas podrían irse por el Cedre», afirmó el concejal.

CUÁNDO // El segundo hándicap es el día. Este animado acontecimiento tiene lugar, habitualmente, el primer domingo de fiestas, pero se da la circunstancia que, en el 2020, esa jornada es el día de Sant Pasqual, con la correspondiente procesión vespertina, incompatible, a priori, con el desfile. El pleno municipal aprobó en agosto que el lunes 18 sea festivo local, una de las alternativas al no poder celebrarse el domingo, pero un día entre semana podría suponer un descenso de la participación, ya que hay peñistas que trabajan fuera de Vila-real.

Por ahora, aún no se ha fijado un día para que los responsables del Ayuntamiento y de la Comissió de Penyes se reúnan para abordar esta y otras cuestiones respecto a los festejos patronales pero es voluntad de ambas partes mantener este encuentro.