Un total de 26 niños de entre ocho y 15 años han participado en el proyecto socioeducativo Promou que impulsa la Concejalía de Servicios Sociales. Esta iniciativa, que pretende ocupar el vacío existente en cuanto a actividades lúdicas y de integración con pequeños en riesgo de exclusión o con medidas de protección, ha vuelto a organizar este año un campamento de verano.
El concejal de Servicios Sociales, Álvaro Escorihuela, y la concejala de Inclusión Social, Anna Vicens, visitaron a los participantes, que estuvieron en el Mas de Borràs desde el pasado lunes 24 hasta ayer. «Ha sido una experiencia en la que han podido disfrutar de todo tipo de actividades lúdicas y de ocio diseñadas para ayudarles a remover los obstáculos que les impiden la inserción social desde el acercamiento a la naturaleza, a los animales y al deporte», señalan los ediles.
Escorihuela explica que «esta actividad contribuye a mejorar su calidad de vida, ya que les permite desconectar de su día a día y vivir en un entorno distinto, siempre atendidos por expertos que llevan a cabo su seguimiento y que no solo intervienen con ellos, sino que también hacen partícipes a sus familias con el reto de ayudarles al máximo».
El concejal, que se muestra satisfecho con el funcionamiento del programa, en marcha desde hace seis años, señala que «el Promou es uno de los proyectos más importantes para el área».
