Hasta 250.000 euros podría costar al Ayuntamiento la compra o expropiación de las casas y naves existentes junto a la estación del tren --que datan de principios del siglo XX-- y que en la actualidad se encuentran en un estado de claro deterioro, lo que genera una imagen “muy mejorable” --según indican fuentes municipales-- de una de las zonas de la ciudad más utilizadas.

Así lo han informado las inmobiliarias consultadas por Mediterráneo, basándose en el precio de este tipo de construcciones que, como aseguran, “se trata de viviendas viejas o almacenes que están en suelo urbano, pero que, muy probablemente, en el caso de derribarse, los terrenos pasarían a ser de uso terciario”.

Y es que, como confirmó a este rotativo el concejal de Territorio, Emilio Obiol, el anteproyecto que maneja su departamento dirigido a “dignificar esta puerta de entrada a la ciudad que es la terminal del tren” no solo contempla el derribo del murete que cierra el recinto de la estación, sino que “va aún más allá e incluye la futura creación de una zona ajardinada que, muy probablemente, tendría una temática ferroviaria”.

Se trataría de una segunda fase de un proyecto que, en principio, contempla abrir este espacio a la ciudad habilitando, además, una parada de autobuses con capacidad para tres vehículos de gran tamaño, así como arbolado, un área de aparcamiento para coches y aceras amplias.

“El entorno de este tipo de terminales de Renfe siempre ha tenido una finalidad verde, como la tuvo en su día Castellón con el pulmón del parque Ribalta”, explica Obiol, quien hace hincapié que, aunque por el momento y por cuestiones presupuestarias solo es posible acometer una primera fase, “este es un proyecto global, como tiene que ser”, a través del cual van “a dar soluciones para el presente, mientras se planifica para el futuro un compromiso más a medio plazo”.

El edil de Territorio de Vila-real considera que esta intervención, en su conjunto, “permitiría oxigenar una avenida de França con una alta densidad de tráfico, con la creación de un parque que, aunque no sería muy grande, daría una mejor imagen a la zona este del casco urbano”. Y añade: “Sería un pequeño pulmón verde que lograría hacer más cómodo y habitable este área de la ciudad, que está muy edificada y que carece de espacios verdes y de ocio.

Como publicó ayer este periódico, el consistorio quiere acometer “cuanto antes” una primera actuación que, por importe de unos 250.000 euros, uniría la estación del tren con la avenida França, derribando el muro. H