La aceptación por parte del Ministerio de Fomento de la propuesta realizada por la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio para solucionar con una gran rotonda la conexión de la futura ronda suroeste con la N-340 está a expensas de los resultados del estudio que llevan a cabo los técnicos del Gobierno central respecto a la si la liberalización de la autopista AP-7 --prevista para final del presente año de 2019-- tendrá un efecto suficiente sobre la carretera estatal, en el sentido de reducir considerablemente el tráfico rodado por el tramo que discurre de Vila-real a les Alqueries.

Así lo confirman a Mediterráneo fuentes del Ejecutivo central, a la vez que aseguran que tienen en consideración la iniciativa que plantea la Generalitat para dar solución a esta conexión, que por otra parte empieza a ser más urgente después de la adjudicación provisional a la unión temporal de empresas integrada por Durantia Infraestructuras y Corporación Europea de Servicios y Capitales de la construcción de la ronda, por un importe de 7,8 millones (IVA incluido).

En cualquier caso, y según ha podido saber este rotativo, en el momento actual la opinión de los técnicos ministeriales no es muy favorable a la construcción de una gran glorieta en el punto en el que deben concluir la circunvalación por el oeste del casco urbano con la N-340, en razón a la «peligrosidad» que aseguran que podría generarse, teniendo en cuenta que por este tramo circula una media de 30.000 vehículos cada día. De ahí, la necesidad de esperar a concluir el estudio del efecto de la liberalización de la AP-7, para determinar si la reducción del tráfico en la vía estatal, especialmente de vehículos pesados, será lo suficientemente importante como para dar autorización a la rotonda.

ACCESO AUTOPISTA // Además, también tendrán en consideración el hecho de que, como reclamó la Generalitat a Fomento, Vila-real cuente a corto plazo con un acceso y salida de la actual AP-7, a través de la carretera de Onda, lo que favorecería que muchos camiones tomaran esta autovía, actualmente de pago.

Por su parte, desde la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio confían en que no se demore en exceso una respuesta, que esperan que sea positiva, con el fin de poner en marcha la maquinaria y el proceso necesario para licitar la segunda fase de la ronda, dirigida a dar forma a un nexo de unión entre ambas carreteras.

La propuesta de la Administración autonómica pasa por dar forma en este punto a una glorieta que evite el mayor desembolso económico que supondría realizar la conexión a distinto nivel.