Luz verde a la ronda Suroeste de Vila-real, una de las actuaciones pendientes «prioritarias», tanto para el Ayuntamiento, como para la Generalitat. La Conselleria de Obras Públicas aprobó ayer el proyecto de construcción de la infraestructura y, de este modo, arranca paralelamente el proceso burocrático para la licitación de la contratación de las obras. El presupuesto marcado inicialmente asciende a 9.508.497 euros.

Una esperada noticia que el departamento que dirige María José Salvador trasladará este jueves a la delegación municipal, que mantendrá una reunión en València con el director general de Obras Públicas, Carlos Domingo.

Detalles

El planteamiento ratificado comprende la reforma del tramo que discurre entre la calle de la antigua carretera de Viver al puerto de Burriana (viejo vial de Onda) hasta la nueva rotonda de conexión con la calle Camí de les Voltes, que conecta con el exterior del polígono de Porcelanosa, punto desde el cual el tráfico puede acceder a la zona industrial y a ramales de la N-340.

La circunvalación servirá para vertebrar el tráfico de vehículos pesados, evitando su paso por el centro del municipio. Se configurará como un elemento urbano que agilizará la circulación y estará formado por cinco enlaces, a nivel, y resueltos por glorietas.

La sección transversal de la calzada estará compuesta por un carril por sentido de 3,5 metros cada uno, arcenes de 0,5 metros a ambos lados y franjas laterales delimitadas mediante bordillos. Su diseño permitirá en el futuro el desdoblamiento, reservando un espacio en la segunda calzada para crear una vía ciclopeatonal y también una zona ajardinada para integrarla en el entorno y reducir el impacto visual.

Conexión N-340

Uno de los aspectos controvertidos era el enlace con la N-340, tras las informaciones sobre el riesgo de inundabilidad del emplazamiento. Fuentes de Obras Públicas aseguran que esta conexión no formará parte del actual plan y tendrá «un tratamiento aparte, con una solución pendiente de acordar con el Ministerio».

Además, aprovechan el anuncio del ministro José Luis Ábalos de la liberalización de la AP-7. «Permitirá la aceptación de la solución planteada inicialmente por la Conselleria de una rotonda en lugar de un enlace», apuntan. Por otro lado, las actuaciones implicarán la reposición de servicios afectados, como la red eléctrica, telefónica, agua potable, gas, riego y de saneamiento.