Cuatro agentes velarán por la seguridad de las 60 mujeres víctimas de la violencia de género que hay, actualmente, en Vila-real. Para intentar luchar contra esta “lacra” social, el alcalde de la ciudad, José Benlloch; y el subdelegado del Gobierno en Castellón, David Barelles, firmaron ayer un protocolo de colaboración, cuyo punto principal contempla la dedicación exclusiva a tiempo completo de dos policías locales en la lucha contra la violencia sexista. Por tanto, estos efectivos se unirán a los dos agentes de la Policía Nacional que, hasta ahora, se encargaban de esta materia.
“Se multiplican por dos los esfuerzos y el personal, al liberar a dos de los 108 policías locales de sus tareas. Hemos querido ir más allá”, apuntó el primer edil, quien destacó el trabajo realizado durante los últimos años por las concejalías de Igualdad, a través de la Casa de la Dona; y de Servicios Sociales en la prevención y lucha contra este problema social. “El porcentaje de víctimas, respecto a otros municipios, es bajo, pero no estamos satisfechos porque, a pesar de todos los recursos, esta problemática no para”, remarcó el munícipe.
Por su parte, Barelles recalcó que, gracias a la colaboración ofrecida, Vila-real cuenta con un protocolo específico que va más allá. Por tanto, a los dos agentes locales se suma también la posibilidad de este cuerpo de acceder a la base de datos estatal sobre violencia de género para poder consultar y modificar datos de las víctimas y sus agresores.
Además, se creará una mesa técnica con representantes de las cuatro administraciones y entidades para dar a conocer todos los recursos para combatir este tipo de violencia. Este es el quinto protocolo que se firma en la provincia, junto a Castellón, Peñíscola, Almassora y Benicàssim.
Barelles informó en la junta de seguridad de ayer que las infracciones penales bajaron el año pasado un 6,1% respecto al año anterior. Un punto más que la media a nivel autonómico. H
