La Coordinadora Valenciana de ONGD volvió a denunciar ayer que el Ayuntamiento de Vila-real «sigue reteniendo los pagos a proyectos de cooperación, a pesar de las promesas realizadas por el alcalde, José Benlloch, quien se comprometió personalmente a que, antes de las elecciones municipales, se abonarían las cuantías que se deben a las oenegés desde hace casi cuatro años y que las organizaciones solidarias tuvieron que adelantar de sus fondos propios. Y añaden que «también prometió que se abonarían los montantes aprobados en los presupuestos del 2017 y saldría la convocatoria pendiente de ayudas del 2018, junto a las previstas para el 2019. Ninguna de esas promesas se han cumplido».
Por su parte, el concejal de Servicios Sociales, Álvaro Escorihuela, garantizó ayer mismo a estas asociaciones con ayudas a proyectos de desarrollo concedidas «que los expedientes para el pago de las cantidades pendientes están en plena tramitación», a la vez que subrayó que, «en ningún caso existe bloqueo alguno ni riesgo de no ser abonadas».
En cualquier caso, desde la coordinadora amenazan con la ausencia de las entidades afectadas en la próxima edición de la Fira de la Solidaritat, de no solucionarse este problema.
Escorihuela volvió a disculparse ayer ante los responsables de la organización por «las trabas burocráticas» y «dificultades administrativas» en los trámites.
