El endeudamiento municipal se situará en 2017 en un 46,76%, que supone una reducción de 25 puntos desde el año 2011, cuando el equipo de gobierno actual asumió las riendas del consistorio. La deuda financiera se situó en el 2011 en un 72%. «Con mucho esfuerzo y responsabilidad, en los últimos años hemos logrado reducir el endeudamiento progresivamente hasta situarlo en una previsión del 46,76%, que nos da mayor seguridad y garantías para afrontar los retos del futuro, como podría ser la llegada de fondos europeos para la estrategia DUSI», valora la concejala de Hacienda, Sabina Escrig.

La disminución de la deuda con las entidades financieras ha sido paulatina y continua, pasando del 72% al 65%, en el 2012, y el 59,46% en el 2013. Los años siguientes se redujo aún más, hasta el 50,49% (2014) y 47,04% (2015), mientras que en el 2016 se produjo un ligero repunte hasta el 50,03% por la bajada de la contribución. Escrig recuerda que el cálculo depende de los ingresos, por lo que en ese ejercicio, al tener menos, la deuda aumentó. Para este ejercicio, las previsiones son de nuevo a la baja, con una reducción de más de tres puntos con respecto al 2016.