El volteo general de campanas dio ayer aviso a los vecinos del barrio del Pilar que se iniciaban sus fiestas anuales. Unas celebraciones que arrancaron con la tradicional entrega de la Clau de la Festa, que se pasa de barrio en barrio e, incluso, a los festejos patronales que Vila-real celebra por Sant Pasqual y la Mare de Déu de Gràcia.

Pero esta cita fue solo el inicio de los actos que se incluyen en el programa que se alargará hasta el domingo, 13 de octubre, y en el que se incluyen un buen número de actividades, todas ellas con un marcado carácter popular.

Concurso de guiñote, encuentro de multilabores, juegos infantiles, actuaciones de grupos musicales, la tradicional Xulla por las calles del barrio, almuerzos de pa i porta, certámenes de petanca o de dominó, bou de carretó, batucada o los actos religiosos de la misa y la procesión por la Virgen del Pilar son algunos ejemplos.