La corporación municipal de Vila-real aprobó ayer, por unanimidad, impulsar el aprovechamiento de nichos ya construidos en el cementerio municipal, facilitando los trámites para permitir la reagrupación de los restos de familiares, lo que posibilitará liberar sepulturas y, por tanto, ampliar la vida útil del camposanto.

Al respecto, la concejala del área, Rosario Royo, hizo hincapié en que desde el ejecutivo que lidera el socialista José Benlloch, «se han realizado diferentes y continuas actuaciones para construir más unidades de enterramientos y para optimizar las ya existentes, con el objetivo de prolongar el uso del recinto».

La edila explicó a Mediterráneo que, con el reglamento avalado ayer por unanimidad, los ciudadanos podrán colocar en un nicho --incluso ocupado por otro familiar-- las cenizas de los seres queridos que hayan sido incinerados, de manera que no será necesario adquirir una sepultura o un columbario. «Esta era una opción que no se permitía», indicó.

Asimismo, por primera vez se admiten los restos de más de dos difuntos en una misma sepultura, «siempre que haya la suficiente capacidad para ello y teniendo en cuenta que se mantiene, por cuestiones de salubridad, la espera de cinco años entre un enterramiento y otro». Y recalcó que los precios «se reducen de una manera importante para que todo el mundo pueda aprovechar estas nuevas posibilidades».

Por otra parte, el pleno sacó adelante una moción conjunta del PSPV-PSOE, PP y Ciudadanos en favor de la equiparación de los salarios de los cuerpos de seguridad del Estado. Un punto en el que populares y Cs criticaron la postura adoptada por Compromís --que se abstuvo--. En concreto, el portavoz del PP, Héctor Folgado, aprovechó para acusar de «radical» a la formación que comparte gobierno municipal con el PSPV. Mientras, el concejal nacionalista Santi Cortells, defendió la postura de su grupo y calificó de «farsa» y de «incongruencia» una propuesta que «mañana mismo puede aprobar el Gobierno de Mariano Rajoy, ya que es una competencia del Estado».

También se dio luz verde, con la abstención de PP y Cs, a una relación de pagos por importe de 29.429 euros «de facturas por servicios realizados sin dotación en ese momento», aseveró la edila de Hacienda, Sabina Escrig.