La Feria de Abril de Vila-real cerró ayer sus puertas. Y lo hizo a lo grande, con un espectáculo ecuestre en el parque de la Panderola que encandiló al numeroso público que se congregó en el lugar para seguir uno de los actos estrellas del programa para esta cita preparado por la Asociación Cultural Flamenca Andaluza.

Caballos y jinetes demostraron clase y experiencia en este evento matinal que dio paso a una degustación gastronómica, con productos y elaboraciones culinarias típicas de Andalucía.

Y ya por la tarde, la actuación del cuadro infantil Pequeñas Flamencas y del grupo Jakaranda pusieron el punto final a tres jornadas de fiesta en el parque de la Panderola, en los que no han faltado los tradicionales rebujitos.

Con esta peculiar Feria de Abril vila-realense, los cientos de vecinos que proceden de tierras andaluzas, así como también sus hijos y nietos ya nacidos aquí, trasladaron un trocito de su patria natal y revivieron sus costumbres que, al mismo tiempo, han compartido con todo aquel que ha querido sumarse a esta fiesta.