El 23 de marzo de 1959, los restos de 268 personas fueron trasladados desde el Cementerio Municipal de Vila-real para ser enterrados en el Valle de los Caídos, con motivo de la inauguración del mausoleo franquista. Tras un exhaustivo análisis de la documentación que conserva el Arxiu Municipal, el informe técnico elaborado por el departamento municipal ha permitido determinar los nombres de 244 de los exhumados e identificar a los 14 vecinos de Vila-real que fueron llevados a Cuelgamuros para su soterramiento en el monumento funerario construido por la dictadura franquista. De ellos, existe constancia documental de la inhumación en la basílica de, al menos, ocho vila-realenses.

DOCUMENTACIÓN // El escrito analiza toda la documentación existente respecto a estas exhumaciones y detalla que de los 268 cuerpos, cinco de ellos --enterrados en fosas particulares-- fueron llevados a Cuelgamuros en cajas individuales, mientras que los otros 263 fallecidos fueron trasladados colectivamente en 18 cajas. La relación de los traslados permite identificar nombre, profesión y causa de la muerte -la inmensa mayoría, soldados o mandos fallecidos «a consecuencia de la guerra», según el documento-- de 244 de ellos. El resto, constan como «desconocidos».

A este listado -la relación número 19 «de los gloriosos restos procedentes de la Cruzada Nacional»--, se suman otros escritos del alcalde de la época, en 1958 y 1959, con peticiones de familias vila-realenses para trasladar cuerpos de familiares al Valle de los Caídos, tanto desde el Cementerio municipal como desde otros puntos de la provincia o el país.

«Toda la documentación y la investigación queda a disposición de todas las familias que puedan requerirlo», señaló el alcalde José Benlloch, que puso el consistorio a disposición de los familiares de los trasladados para ayudarles en el ejercicio de sus derechos de reparación de la memoria.