El Ayuntamiento de Vila-real, a través de la Concejalía de Agricultura, Medio Ambiente y Cambio Climático, lidera un proyecto experimental que supondrá la creación de un innovador Banco Mediterráneo de Micorrizas, con el objetivo de investigar el efecto positivo de estos hongos sobre los cítricos y favorecer la competitividad de la agricultura y la mejora de la calidad y los procesos de producción. El plan, impulsado en colaboración con el Fundación Instituto de Agricultura Ecológica y Sostenible (Fiaes) y la Conselleria de Agricultura, se desarrollará durante tres años y supone la implantación en viveros de los hongos, con la creación de una finca de referencia en citricultura que permita transferir los resultados a los productores de la Comunitat Valenciana.

El alcalde, José Benlloch, destacó que «los cítricos son la primera especie frutal en importancia económica y social en Vila-real y en la autonomía», por eso pretenden «seguir ayudando a introducir innovaciones que beneficien a los productores y también al medio ambiente, colocando a la ciudad como referente en un área tan importante para la economía como es la agricultura».

El edil de Agricultura, Josep Pasqual Sancho, indica que esta acción «aborda con un enfoque multidisciplinar la aplicación de un método innovador que ofrece soluciones sostenibles a los principales problemas de cultivo y mejorar la producción».