El Centre de Congressos, Fires i Trobades de Vila-real centralizó ayer buena parte de la actividad lúdica y cultural de la ciudad. Y es que el recinto municipal fue el escenario de una nueva edición, y ya van 18, del desfile solidario que, cada año, organizan las Juventudes Carmelitas (Jucar) para recaudar fondos con los que hacer frente a parte o todo el coste de infraestructuras y servicios en países en vías de desarrollo.
Más de 1.500 personas no quisieron perderse anoche un acontecimiento en el que tomaron parte activa, como actores o modelos, en torno a 150 niños y jóvenes vinculados a la comunidad carmelita vila-realense y al colegio concertado que regenta la orden en la calle Ermita.
En el evento colaboraron de una u otra forma alrededor de 70 empresas y comercios de la ciudad que, de esta manera y con la masiva asistencia de público --el donativo para acceder al Centre de Congressos era de solo cuatro euros--, hicieron posible la recaudación de fondos para un proyecto sanitario en Haití.
TEMÁTICA /
Esta vez, el argumento sobre el que giró el desfile de Jucar y en el que los jóvenes de la entidad pusieron todo su empeño fue el de la mítica película y musical Grease. Los muchachos y muchachas escenificaron a la perfección varios sketches de esta producción norteamericana de 1978, ambientada en los años 50.
Y todo ello para recaudar fondos destinados a las Hermanas de la Virgen de la Montaña Carmelo en Ansa-A-Pitre, en el sureste de Haití, en la frontera de Pedernales. Un país en el que, aproximadamente, un 70% de la población vive en situación de pobreza.
La iniciativa tiene por objetivo mejorar la atención sanitaria con la dotación del dispensario médico Santa Teresita y, además, se promocionará la salud preventiva y se facilitarán medicamentos esenciales. El proyecto, valorado en 43.200 euros podría beneficiar a más de 18.000 personas.
