La Conselleria de Justicia, Administraciones Públicas y Reformas Democráticas se mostró ayer dispuesta a estudiar la demanda del colectivo judicial de Vila-real, de la que ayer se hizo eco Mediterráneo, en el sentido de la necesidad de designar un abogado de turno exclusivo para los casos de violencia de género, para prestar el apoyo letrado a que tienen derecho los detenidos y sin que se produzcan distorsiones en el propio sistema, con retrasos en la atención a otros procedimientos ordinarios, dada la prioridad que se da a los asuntos relacionados con presuntas agresiones machistas.
Así lo aseguraron ayer fuentes del departamento que encabeza la consellera Gabriela Bravo, desde donde avanzaron que la próxima semana está prevista una reunión con la decana de la sede judicial de Vila-real, Macarena Mira, «para abordar esta y otras necesidades» que les trasladen, «para su análisis y asumirlas, en la medida de lo posible».
Los profesionales del Palau de Justícia de Vila-real insisten en la necesidad de poner en práctica esta medida, a parte de cubrir las bajas existentes y reforzar el personal para poder hacer frente «con efectividad» a las nuevas necesidades que se generan en la sede judicial, tras asumir este Juzgado de Violencia de Género, los casos que se producen en los partidos judiciales de Nules y de Segorbe, lo que supone multiplicar por tres, los asuntos a resolver por la sección vila-realense.
