La proliferación de palomos que se cobijan e, incluso, llegan a anidar en distintos rincones del Estadio de la Cerámica se ha convertido en un auténtico dolor de cabeza, tanto para el propio Villarreal CF como para el Ayuntamiento y los ciudadanos.

Los excrementos de estas aves, que ensucian las instalaciones deportivas y las terrazas de las viviendas del entorno del campo de fútbol, no son el único problema que generan, por cuanto, además, se lanzan sobre el césped para comerse las semillas que se reparten por el terreno de juego con el fin de reponer la hierba.

Es por ello que desde el club se están impulsando, en colaboración con las autoridades locales y desde hace varios meses, una serie de medidas para evitar que los palomos aniden en el estadio, como la colocación de rejillas metálicas que impiden su paso a los rincones más elevados del recinto deportivo, así como el uso de aves rapaces: un águila de Harris, durante el día; y un búho real, por las noches, cuyo objetivo es convertirse en una amenaza real para la plaga de colúmbidas e incordiar a estos animales hasta el extremo que decidan abandonar las instalaciones que ocupan.

Paralelamente a todo ello, las recientes actuaciones de ampliación de la zona de tribuna han incluido la instalación de rejillas que impiden el paso de las aves. Unas mallas que también se han puesto en los espacios más elevados de los fondos norte y sur y que, según fuentes del Villarreal CF, se prevé situar también en el área de preferencia aprovechando los previsibles trabajos, cara ya al verano del 2018, para ampliar la cubierta de esta zona.

Con todo, el club amarillo sí que realizará en los próximos días o semanas las labores necesarias para bloquear algunos resquicios que aprovechan los palomos para guarecerse en el exterior de preferencia. Asimismo, las mismas fuentes señalan que también se han probado algunos otros métodos --con menos o mayor éxito--, como la utilización de ultrasonidos o la colocación de pastillas ahuyentadoras sobre los altavoces, elementos sobre los que se suelen posar y ensuciar.

Por su parte, el alcalde, José Benlloch, hace hincapié en la colaboración del Villarreal CF y el Ayuntamiento para minimizar los problemas que generan este tipo de aves que, recalca, «también son portadoras de enfermedades si no se las controla».