La Policía Local de Vila-real, a través de los agentes motorizados y la Unidad de Atestados, va a incrementar el control para evitar la circulación de bicicletas por espacios habilitados en exclusiva para su uso por parte de los peatones, como es el caso de las aceras. Una medida que responde a las quejas recibidas en este sentido por parte de viandantes que han visto invadir su espacio por ciclistas.

Según explicaron ayer el concejal de Seguridad Ciudadana, Javier Serralvo; y el intendente general de la Policía Local, José Ramón Nieto, la campaña que se desarrollará del 6 al 20 de junio se lleva a cabo para “favorecer el respeto y la convivencia en el uso del espacio público por parte de ciclistas y peatones”.

En concreto, la iniciativa persigue lograr una mayor difusión de las obligaciones y la normativa aplicable al uso de la bici por la ciudad, como son la prohibición de circular por las aceras o la preferencia del viandante cuando se transita en zonas peatonales, “donde sí que está permitido ir en bicicleta, pero siempre garantizando la seguridad de quienes van a pie”, explica el intendente Nieto.

MULTAS // En este sentido, el jefe de la Policía Local explicó que, por ejemplo, circular en bici por una acera se considera una infracción grave que puede llevar acarreada una sanción de 200 euros. De hecho, durante el 2015, los agentes locales impusieron 11 multas a ciclistas, la mayor parte por transitar por lugares destinados a peatones, aunque también por ir en sentido contrario o por no detenerse en un paso de cebra.

Pero los policías no solo apercibirán a los ciclistas que no cumplan con sus obligaciones sino que también harán lo propio por quienes vayan a pie por espacios destinados a vehículos de dos ruedas no motorizados, como es el carril bici que discurre por la calle Ermita hasta el paraje del Termet y que, a diario, también utilizan runners y personas que andan por él. H