Los datos confirman que el trabajo que viene llevándose a cabo en Vila-real desde hace 15 años en materia de prevención del consumo de todo tipo de drogas, tanto legales --alcohol y tabaco-- como ilegales --especialmente, cannabis--, está dando muy buenos frutos.

Así se desprende de los datos facilitados ayer por la concejala de Sanidad, Silvia Gómez; y por el técnico de la Unitat de Prevenció Comunitària de Conductes Addictives (UPCCA), José Gisbert. Y es que, según explicó Gisbert, la última encuesta realizada a los algo más de 2.300 estudiantes de Educación Secundaria de Vila-real, de entre 12 y 16 años, constata un descenso considerable en el consumo de estos dos tipos de sustancias adictivas. Una reducción que también se da en el caso hachís y marihuana, aunque no de una forma tan pronunciada.

En cualquier caso, Gisbert destacó que, en el caso de las bebidas alcohólicas, aunque hay menos adolescentes que las toman puntualmente --se ha pasado del 40,3% del 2008 al 31,8% del último sondeo-- «los que las consumen protagonizan más episodios de borrachera que antes».

Es por ello que, tanto el técnico de la UPCCA como la edila Gómez coincidieron en destacar la necesidad de continuar con las acciones que viene desarrollando el consistorio, en lo referente a esta droga legal y socialmente admitida, «para educar en un consumo responsable»; un proceso en el que consideran que la familia «es fundamental».

A DESTACAR // En cualquier caso, Gisbert hizo hincapié en que uno de los logros de los últimos años está en que «se ha incrementado la edad de inicio en alcohol o tabaco, ya que hace 15 años estaba en torno a los 13 años y ahora los que empiezan lo hacen con 14 ó 15 años. Algo parece que estamos haciendo bien, aunque no hay que bajar la guardia». Asimismo, incidió en el hecho de que «normalmente, nadie se fija en la cantidad de jóvenes que no beben alcohol, que ha pasado del 29,5% al 42,4% en 10 años», al menos hasta que finalizan la escolarización obligatoria en cuarto de ESO.

Por lo que respecta al tabaco, la cantidad de adolescentes fumadores ha caído de manera drástica en Vila-real en la última década --del 20,3% al 9,9%--, con especial incidencia desde la entrada en vigor efectiva de la Ley Antitabaco, en el año 2007. «Cada vez más, la población joven rechaza poner tóxicos en su cuerpo; incluso los hay que no quieren ni probar la Coca-Cola por la cafeína que contiene», dijo Gisbert.

Y en cuanto al cannabis, el descenso ha sido de nueve puntos (del 32,4% al 23,2%) en jóvenes de 16 años, mientras que a los 12 años «es inexistente», aseveró.

El técnico de la Unitat de Prevenció Comunitària de Vila-real, José Gisbert, destacó el hecho de que, desde que este departamento municipal iniciara las encuestas bienales entre el alumnado de ESO, han cambiado los hábitos, de manera que videojuegos, uso del móvil y apuestas on line. Al respecto, Gisbert señaló que el 94% de jóvenes de 12 a 16 años dispone de teléfono móvil; el 22% invierte en los videojuegos más de tres horas diarias entre semana; y que el 13% de los 2.300 encuestados asegura haber gastado dinero en apuestas -básicamente deportivas- on line. «Y lo que es más preocupante, el 5% de ellos lo hace con cierta frecuencia», señaló Gisbert.