Vila-real despidió ayer y a lo grande el periodo vacacional escolar de la Semana Santa y Pascua. Y lo hizo tomando como referente el paraje del Termet para, como colofón en el día de Sant Vicent, merendar la típica mona, pese a que al tratarse de una jornada laborable, la afluencia no fue tan destacada como en las festivas que son de carácter oficial.

Aun así, no fueron pocas las familias que aprovecharon para apurar las últimas horas de estas vacaciones escolares en el espacio natural vila-realense, paseando por los diferentes rincones del mismo y, en especial, bordeando el cauce del Millars, especialmente vistoso estos días con el importante caudal de agua que quedó tras las últimas precipitaciones.

COOPERATIVISMO // Por otra parte, también la Fundació Caixa Rural Vila-real puso su granito de arena para cerrar, con una actividad frenética, el periodo vacacional.

Y lo hizo con la celebración de la Festa dels Xiquets, que se enmarca en la Semana del Cooperativismo y que pone fin a la programación, de la que disfrutaron un millar de pequeños vila-realenses. Un evento en el que se pone especial énfasis en el ambiente familiar que se respira en el mismo, así como en la realización de talleres educativos y las más variadas actividades lúdicas.

Entre las atracciones que registraron mayor éxito de convocatoria, tanto por la mañana como por la tarde, estaban el toro mecánico, el típico trenet y los castillos hinchables, a los que se sumaron divertidos personajes.

Una vez más, las rosarieras y las purisimeras colaboraron con Caixa Rural en la organización de talleres, mientras que el mago vila-realense Andy puso, como novedad en esta edición, el punto de ilusionismo a la jornada. H