Ninguna empresa ha concurrido a la licitación, en primera convocatoria, para dirigir la Escola Municipal de Dansa de Vila-real. La falta de proposiciones motiva que el consistorio abra un nuevo plazo para mantener este servicio que nació bajo el paraguas de la coreógrafa Pepa Cases, de A tempo dansa, y que ha dirigido desde 2012 esta iniciativa.

Cases ya advirtió de que no presentaría ningún proyecto para mantenerse al frente. Lo anunció en un escrito en el que dejó constancia de su malestar por las formas en las que se produjo la licitación, al no haber podido mantener una reunión «digna» con los responsables de la Concejalía de Cultura para abordar alternativas. Además, tildó de «falta de respeto» hacia los profesionales y de «lástima» en referencia al alumnado la situación vivida.

En la resolución publicada tras quedar desierto el primer procedimiento, desde el consistorio se apunta a la voluntad de que el servicio de gestión y dirección de la Escola «pueda llevarse a cabo, por el interés despertado en la población y, atendido que en estos momentos se ha tenido que interrumpir la ejecución del servicio a mitad del curso escolar a consecuencia de la finalización del anterior contrato de servicios, y con el ánimo de que pueda restablecerse el mismo con la máxima celeridad posible causando los mínimos perjuicios a los alumnos participantes». El valor estimado del contrato, incluidas las posibles prórrogas, está marcado en 102.718,75 euros, que incluyen los ejercicios 2021 y 2022 completos, así como la reactivación del servicio, a partir del 7 de enero, hasta final de curso en mayo.

GESTIÓN DE eventos // La nueva Ley de Contratación es, según explica la edila de Cultura, Rosario Royo, la causante de que la Concejalía saque a licitación la gestión y coordinación de festivales y ciclos culturales. La cifra asciende a 72.600 euros con IVA incluido para los dos años previstos. «Estamos contentos con el actual programador, pero el contrato está a punto de finalizar y al ser algo recurrente que excede la cantidad máxima por norma, debemos abrir esta figura a cualquier empresa», señala Royo. Añade que ante este asunto, estén «de acuerdo o no --en referencia a lo acontecido con las escuelas municipales-», la ley les «obliga a hacerlo» de esta manera.

El personal municipal, recoge también la documentación, no puede asumir las labores que suponen la casi decena de eventos previstos para el próximo año, entre festivales y ciclos.