La Policía Local de Vila-real inicia mañana lunes una nueva campaña de control de transporte escolar, en colaboración con la Dirección General de Tráfico (DGT). Se trata de la primera del 2019 del cuerpo de seguridad municipal, que cerró el ejercicio pasado con un total de 15 acciones centradas en diferentes aspectos, como la seguridad en el campo, perros peligrosos o vigilancia del consumo de alcohol y drogas al volante para evitar los accidentes.

Esta nueva campaña tiene como objetivo garantizar la seguridad de los menores y certificar que los vehículos en los cuales se trasladan cumplen todas las medidas que marca la normativa, además de proveer a las familias y comunidad educativa de recomendaciones para sus desplazamientos a los colegios.

Durante toda la semana, los agentes intensificarán las inspecciones sobre el transporte escolar y comprobarán que las autorizaciones y documentos que tienen que tener sean los correctos para la prestación del servicio. Con este objetivo, se verificará que las condiciones técnicas y elementos de seguridad son los que exige la ley y que los requisitos especiales que tiene que cumplir el conductor, son los estipulados.

Entre otras cuestiones, la vigilancia prestará especial atención al uso del cinturón y sistemas de retención en aquellos autobuses que los tengan instalados, circunstancia que ya se da en más del 60% de estos vehículos.