Los agentes del Grupo Rural y de la Unidad de Respuesta Policial (URP) de la Policía Local de Vila-real iniciarán el próximo lunes una nueva campaña de prevención de hurtos en el campo, que incidirá tanto en la sustracción de naranjas como de cajones, y que se prolongará hasta el 24 de marzo.

La iniciativa constará de dos fases, una dinámica y otra estática. En la primera, se revisará y controlará a las cuadrillas de collidors en las distintas partidas del municipio, obteniendo información de la empresa recolectora, así como de la contratista, ubicación y propietario del campo y variedad recogida. Todo ello comprobado in situ, especialmente, a través del jefe de la cuadrilla.

La fase estática implicará controles de tráfico, conjuntamente con la URP, para comprobar sobre el terreno que no existen irregularidades en la mercancía, solicitando todos los documentos pertinentes de la mercancía y también documentación del vehículo. Estos dispositivos especiales se desplegarán sobre todo en las zonas de acceso a los huertos, incidiendo en los controles a vehículos en puntos estratégicos de las partidas, con el objetivo de comprobar que el producto transportado tiene un origen y un destino lícito.

Asimismo, durante la campaña se solicitará el documento de acompañamiento y trazabilidad agrícola (DATA), que acredita la procedencia y destino de los frutos.