La negativa de tres de los 12 propietarios de terrenos afectados por la actuación a la hora de ceder el suelo que se requería para acometer el plan de mejora de infraestructuras para el polígono industrial Miralcamp ha obligado al Ayuntamiento de Vila-real a abortar el mismo y, por tanto, a renunciar a la subvención de 906.227 euros que concedió el pasado año el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace) en el marco de la convocatoria de ayudas para la adecuación de áreas empresariales.

Así lo informó ayer el alcalde, José Benlloch, quien explicó que estos tres dueños cuentan con «el 60 ó 70% del suelo que se necesitaba para llevar a cabo la actuación», concretó. En total, el consistorio requería la cesión de cerca de 15.000 m2 que«costarían casi 1,4 millones de euros en el caso de expropiarlos, cantidad que no puede asumir el Ayuntamiento en estos momentos».

A parte de no contar el municipio con disponibilidad económica para lograr las parcelas, en el supuesto de optar a la expropiación «no daría tiempo para completar todo el procedimiento administrativo». Un proceso se suele alargar durante meses, lo que impediría acabar las obras antes de final de año, como marcan la bases del concurso del Ivace.

RESPONSABILIDAD // Al respecto, Benlloch aseguró haber actuado «con responsabilidad». Y añadió: «Tenemos que ser realistas, por cuanto este equipo de gobierno no puede hacer lo mismo que el PP, que entraba en los terrenos de forma ilegal, como en el Molí Llop, el jardín de Jaume I o la avenida França. Nosotros no vamos a poner al Ayuntamiento en un lío, como sí que hizo el último gobierno local popular».

El munícipe reconoció que la renuncia a esta intervención --a la que se optó junto a las previstas para los polígonos de la carretera de Onda, de les Voltes y de Molí Nou, que sumaban 3,1 millones de ayudas de la Administración autonómica--, que pese a todo continúa estando en los planes de futuro del ejecutivo local, «es una mala noticia para la ciudad, pero también para los dueños que se han negado a aportar parte de su suelo, ya que podrían multiplicar el valor de unos solares que en la actualidad tienen una difícil salida, pues allí no hay servicios que son necesarios».