Carlos Gil, concejal del PP en el Ayuntamiento de Vila-real, critica que el Club Patí, «uno de los que tienen mayor proyección en la localidad, se vea obligado a competir en Orpesa ante el veto del Ayuntamiento a algunos equipos para usar el pabellón Melilla». Y es que Gil asegura que el consistorio «ha decidido negar» el acceso a este polideportivo al club, «que tiene tres equipos en categoría nacional y ocho en autonómica». El edil popular señala que este «no es un caso aislado y otras entidades tienen que jugar fuera». RD