Moderadamente satisfechos acabaron ayer los representantes del consistorio de Vila-real --entre los que estaban el concejal de Territorio, Emilio Obiol, y el jefe de alcaldía, Chus Madrigal-- que participaron en la reunión mantenida con responsables de la empresa APK2, que en la actualidad gestiona el párking subterráneo de la plaza Major.

Un encuentro que convocó de urgencia el propio edil Obiol, como consecuencia del malestar creado en la ciudad por la supresión de las tarifas planas que el Ayuntamiento pactó con el anterior concesionario para las jornadas de celebración de mercado y el fuerte incremento del coste del estacionamiento en el recinto.

«El encuentro ha ido bien, con buen talante y predisposición por parte de la mercantil a revisar las tarifas que han provocado el malestar de los vecinos y del consistorio», indicaron fuentes municipales. Con todo, los dirigentes de la firma valorarán ahora la propuesta de las autoridades locales y darán una respuesta a la misma «en breve», puntualizaron.

Según ha podido saber Mediterráneo, la petición formulada por el ejecutivo vila-realense va en la dirección de retroceder a la situación que existía antes de que la empresa tomara la decisión de subir tarifas, incluida la bonificación en días de mercado, gracias a la cual los usuarios podían estacionar hasta tres horas en el céntrico párking subterráneo con un coste máximo de 2,45 euros.

MANTENIMIENTO // La que sí que ha conservado la nueva concesionaria del aparcamiento es la tarifa plana de 15.00 a 8.00 horas, aunque incrementando en un euro (en la actualidad está en 3,50) el precio que había antes de aplicar un nuevo sistema automatizado de entrada y salida a un recinto del que el concejal Obiol incidió, en el momento de la convocatoria del encuentro con los responsables de la concesionaria del mismo, en que es «un empastre más de la gestión del PP en Vila-real, que ni siquiera fue capaz de pactar unas reservas de plazas públicas. Sin mencionar el desastre mayúsculo de la propia plaza Major, bajo la que se habilitó el aparcamiento y que multiplicó por cuatro su coste inicial».

Y es que la intención del equipo de gobierno que encabeza José Benlloch es reconducir la situación y que, como se acordó en el 2011, cualquier decisión sobre modificación de precios se lleve a cabo de una manera pactada entre el consistorio y la mercantil.

Una máxima que todo indica que podría hacerse realidad en los próximos días y una vez la firma acepte las exigencias planteadas por las autoridades locales, para las que la existencia de plazas de párking asequibles en el centro «es una prioridad».