Una ciudad sin barreras arquitectónicas y que concienciada sobre las dificultades en accesibilidad. Esa es la aspiración de Josefina Mora, presidenta de Acudim, y de la campaña que plantea el Ayuntamiento de Vila-real, con el rodaje de espots que pretenden sensibilizar sobre esta materia.

Un ejemplo del camino que queda por recorrer se vivió ayer con una peculiar yincana. Mora hizo de guía a cinco alumnas de Educación Infantil de la UJI. Todas, en silla de ruedas, comprobaron en primera persona las dificultades existentes. Estuvieron acompañadas del edil de Servicios Sociales, Álvaro Escorihuela, voluntarios y un policía para recorrer el tramo que separa la sede de la entidad y la plaza Major.

«Ha sido una experiencia que recomiendo. Es la mejor forma de percatarse de los obstáculos que hay en una ciudad, los cuales cuando vas a pie no te das cuenta», explicó María Ángeles Benet, una de las participantes.

La representante de Acudim señaló que propuestas como esta «sirven para tomar conciencia urbana y social de lo que aún falta por hacer». «Para ello, hemos entrado en portales, en puntos cercanos al ayuntamiento o por pasos de peatones peligrosos».

PROYECTO // El Ayuntamiento ha desarrollado en los últimos años multitud de proyectos para eliminar barreras arquitectónicas. El concejal de Servicios Públicos, Francisco Valverde, detalló la preparación de anuncios para reflexionar sobre las esquinas sin aceras en calles y un plan específico sobre accesibilidad.