Las sentencias urbanísticas marcan la elaboración del presupuesto 2018

El Ayuntamiento de Vila-real prepara ya los presupuestos municipales del 2018. Con este objetivo, la concejala de Hacienda, Sabina Escrig, ha solicitado a los miembros del equipo de gobierno que presenten sus prioridades para el año que viene, un ejercicio que, advierte, «volverá estar, lamentablemente, marcado por el lastre del urbanismo del PP».

Al respecto, la edila indica que «los últimos cinco millones de euros en resoluciones del jurado de expropiación que hay que pagar y el riesgo de más de 50 millones que todavía penden sobre las arcas municipales nos obligan a ser muy prudentes. Aun así, haremos un enorme esfuerzo para que esta herencia impacte lo menos posible, buscar soluciones para hacer frente a los pagos y seguir avanzando», detalla Escrig.

Sobre la situación actual, la responsable de Hacienda detalló que «estamos atravesando momentos muy delicados, tratando por todos los medios de buscar soluciones. Ahora, a pesar de haber pagado ya 30 millones en sentencias, préstamos y otro tipo de contingencias, nos llega este nuevo mazazo de cinco millones más». También recordó la noticia que avanzó el alcalde, José Benlloch, de la obligación del Gobierno de destinar el ahorro del 2016 en pago de deuda bancaria.

Una vez recabadas las propuestas de los departamentos para el 2018, el objetivo del consistorio es acelerar los pasos para aprobar las cuentas «cuanto antes».