De récord. Así fue anoche el Sopar de Germanor per a Veïns i Veïnes que se organiza desde la Junta de Festes, con el patrocinio de la Concejalía de Participación Ciudadana y la colaboración de las asociaciones de vecinos.
La cifra de asistentes a este macroevento va en aumento. El pasado septiembre ya tuvo que trasladarse a la avenida la Murà ante el imparable crecimiento en cuanto a participantes. Antes ya pasó de celebrarse en el antiguo Casal de Festes (ahora Centre de Congressos, Fires i Trobades), y de ahí se desplazó al párking, junto a Carrefour; y de aquí a la plaza Major hasta su actual ubicación. Y es que ha superado todas las previsiones de la organización.
Un total de 2.500 vila-realenses tomaron literalmente el tramo de unos 300 metros de longitud de la avenida la Murà, que ya se ha convertido en espacio festivo para eventos multitudinarios.
En la cena se dieron cita residentes vinculados a entidades vecinales, tanto muy veteranas como de reciente creación, como son El Progreso, Barri de l’Hospital, La Cenia, La Unión, El Pilar, Sant Ferran, Torremotxa, Barri Sagrat Cor de Jesús, Cervantes, Botànic Calduch, La Soledat o Nou Crist del Calvari.
REFUERZO // El concejal del área, Xavier Ochando, hizo hincapié en que uno de los objetivos de este acontecimiento festivo, que con la de ayer suma ocho ediciones, es “reforzar las asociaciones de vecinos y la participación ciudadana en Vila-real, dotando a estos colectivos de un espacio propio durante los festejos patronales y favoreciendo la implicación en los mismos del vecindario”.
“Se trata de dar protagonismo en estas fiestas a este tipo de asociaciones y, a su vez, promocionarlas con la venta de los tíquets para esta cena con un precio simbólico de un euro, que invita a los residentes en cada una de las zonas a interesarse por lo que hacen las organizaciones vecinales para mejorar su entorno y la calidad de vida de las personas que allí habitan”, señaló Ochando. H
