El Ayuntamiento de Vila-real, a través de la Concejalía de Servicios Públicos, ha iniciado los trabajos para facilitar la accesibilidad en una de las principales arterias de la ciudad, la avenida Francesc Tárrega, y las calles adyacentes. El objetivo es aprovechar los meses de verano, cuando se reduce la actividad y, por tanto, el tráfico en la ciudad.

Con un presupuesto global de 50.000 euros, los trabajos para mejorar la movilidad arrancaron a la altura de la calle Torrehermosa y ahora continúan en la intersección con el vial Ausiàs March. La actuación, enmarcada en el plan de mejora de la accesibilidad en vías y espacios públicos, consiste en la adecuación de pasos para personas con movilidad reducida e invidentes.

De hecho, cuentan con información táctil en el suelo, con baldosas para informar a las personas ciegas de las sendas por las que acercarse a la calzada y cruzar con mayor seguridad las mismas. Estos pasos, que dan continuidad a otros instalados en Joan Baptista Llorens, Serra d’Irta y Cronista Traver, tienen “unas características técnicas especiales, ya que están realizados con la menor pendiente posible y acaban al nivel de la calzada, sin ningún pequeño bordillo”, señaló el edil de Servicios Públicos, Francisco Valverde.

Además, cuentan con adoquines de color rojo, que indican las áreas de mayor pendiente; y con pavimento amarillo de dos tipos: direccional y señalizador. El primero, con rayas marcadas, sirve para orientar a los invidentes hacia el lugar en el que está la bajada de la acera; y el segundo, con círculos, indica el límite con la calzada. Desde que se puso en marcha el plan, en el 2011, el Ayuntamiento de Vila-real ha realizado más de 200 pasos accesibles con una inversión que alcanza los 350.000 euros, si bien el objetivo marcado por Valverde es terminar la legislatura con la cifra de 400 rampas en total. “La ciudad tiene que estar adaptada para todo el mundo”, afirma el responsable municipal del área.

mejora calidad de vida // Los trabajos los lleva a cabo una empresa local especializada en este tipo de obras. “Se trata de una inversión poco cuantiosa, en comparación con otros trabajos que se realizan, pero muy importante teniendo en cuenta a cuántas personas afecta, ya que no solo hablamos de discapacitados en silla de ruedas o invidentes, hablamos de personas mayores, de carros de bebés, de la compra o andadores”. “Es una iniciativa pensada para hacer la vida más fácil y agradable a todos, porque tarde o temprano a muchos nos puede hacer falta”, señala. En este sentido, Valverde avanza que “aunque se ha hecho mucho, todavía quedan tantos pasos más por hacer, modificar o perfeccionar que se necesitarán años para poner la ciudad a punto, aunque lo importante es que el camino ya está iniciado”, apunta el concejal de Servicios Públicos. H