El Ayuntamiento de Vila-real acaba de sacar a concurso público un proyecto para garantizar las necesidades futuras de abastecimiento de agua industrial para el polígono de la carretera de Onda. Un proyecto que financiarán con cargo a las aportaciones para la renovación de infraestructuras que realiza la empresa concesionaria de la gestión del agua potable de la ciudad y que ejecutarán en paralelo a los trabajos que, subvencionados por el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace) acometen en estos momentos para modernizar las áreas industriales.

En concreto, el consistorio prevé invertir un total de 370.986 euros (IVA incluido) en la creación de un nuevo punto de suministro de la red del Consorcio de Aguas de la Plana, que derivará el caudal al depósito junto a la autopista AP-7, que entró en funcionamiento a finales del 2007 y que tiene una capacidad de 9.000 m3.

«Las áreas industriales de Vila-real están en proceso de transformación gracias a los proyectos de modernización financiados por el Ivace, que esperamos que repercutan en el crecimiento de la red de empresas, por lo que resulta necesario contar con las infraestructuras de abastecimiento hídrico que den respuesta a las necesidades futuras en el polígono de la carretera de Onda», explica el concejal de Servicios Públicos, Francisco Valverde.

OBSTÁCULO // La canalización que pretenden acometer deberá salvar el obstáculo que supone la autopista AP-7 por cuanto, de manera especial, el depósito da servicio a la zona que se extiende a ambos lados de esta carretera desde el vial rápido y hasta la rotonda que habilitarán al inicio de la ronda suroeste.

Valverde hace hincapié en que los más de 370.000 euros que prevén invertir en esta intervención «se autofinanciarán con el fondo de reserva económica que cada año aporta la empresa concesionaria del servicio de agua potable --en este caso, Facsa-- y que únicamente puede destinarse a inversiones para la mejora de las infraestructuras de abastecimiento». De ahí que el edil asegure que la obra «no comportará ningún incremento en el recibo que pagan los más de 26.000 abonados a la red de distribución de agua potable de Vila-real», subraya.

El proyecto de construcción de la nueva conexión está ahora mismo en proceso de licitación y las empresas interesadas tienen hasta el miércoles 29 de enero para presentar sus propuestas.