El Ayuntamiento de Vila-real ha sacado a licitación el primero de los grandes proyectos de mejora de los caminos del término municipal, que se enmarca en el plan de adecuación integral de la red viaria rural que prevé «dejar en perfecto estado de revista el 100% de estas vías en el 2023».

Así lo anunció ayer el concejal de Servicios Públicos, Francisco Valverde, quien explicó que para ejecutar este primer paquete de trabajos se reserva medio millón de euros, cifra de la que el consistorio aporta 320.000 euros y la Diputación otros 180.000.

El proyecto centra esta intervención --que el edil Valverde quiere que esté adjudicada e iniciada antes de acabar el presente ejercicio-- en la partida de Solades, en la que se concentra gran parte de la producción de cítricos del territorio vila-realense. En concreto, se trata de los caminos Primer Sedent, Vora Riu-Solades, Segon Sedeny, parte de Sant Jordi y Na Boneta y Tercer y Quart Sedent.

«Hoy --por ayer-- es uno de esos días que estábamos esperando que llegara y que demuestra que estamos cumpliendo con las obras previstas para el 2019», afirmó el concejal, quien explicó que la actuación permitirá repavimentar con asfalto en caliente un total de 10 kilómetros de vías rurales, que suman una superficie de 45.000 metros cuadrados.

«Es un proyecto de calado, que permitirá dejar en perfectas condiciones los caminos de la zona de l’Horta, ya que no se realiza un simple rebacheo sino que se reasfaltan los viales», indicó.

FUTURO // Valverde hizo hincapié en que esta intervención forma parte del plan de renovación de los 150 kilómetros de vías rurales que se reparten por el término municipal de Vila-real y que se prolongará hasta el año 2023. Una fecha que podría acortarse un año, en el supuesto de conseguir la decidida colaboración de la Conselleria de Agricultura. Una colaboración que, aseveró el edil, «estamos convencidos que será una realidad pronto».

En concreto, el máximo responsable vila-realense en Servicios Públicos explicó que el objetivo es cerrar un convenio con el Consell por importe de otro medio millón de euros, que permitiría actuar en la red viaria rural de la zona delimitada por el río Millars, la carretera de Onda y el límite con este municipio.

La actuación licitada ahora dejará en condiciones un 25% de los caminos rurales de Vila-real.