La Fundación Oceanogràfic presentó ayer los resultados obtenidos por alumnos del colegio Santa María de Vila-real en su proyecto de recuperación de huevos de tiburón procedentes del descarte pesquero, que cuenta con el apoyo de esta fundación y la asociación Lamna. Los primeros resultados señalan que con el agua más caliente el huevo del tiburón tiene un desarrollo más rápido, pero también mayor riesgo de mortalidad y menos reproducción.

Los estudiantes Àlex Claverías y Alejandro Gil, de 4º de ESO y bajo la dirección de su profesor Sisco Marco, iniciaron el proyecto en el 2018 dentro de la asignatura de Cultura Científica, con el objetivo de establecer cómo puede afectar el cambio climático y la temperatura del agua en el desarrollo embrionario y de las crías del tiburón pintarroja (Scyliorhinus canicula).

Tras una visita al Oceanogràfic, los alumnos volvieron al colegio con huevos de tiburón recuperados por Lamna del vientre de hembras del descarte de pesca. Y, además, en el Puerto de Burriana un pescador, padre de una de las alumnas, tenía preparados huevos y hembras preñadas, pescadas accidentalmente, para aprovecharlas en esta experiencia.

La incubación se efectuó en el propio centro educativo en dos acuarios. Uno se introdujo en una vinoteca para mantener el agua a una temperatura constante de 17o, mientras que el otro estuvo en el exterior, a 22o.

Los protagonistas de esta aventura científica y de conservación procedieron a soltar ayer, con la ayuda de buzas del Oceanogràfic, las crías de tiburón en la playa Torrenostra, frente al parque natural Cabanes-Torreblanca.

El proyecto, que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Vila-real y ha sido premiado en la Exporecerca Jove de Barcelona, tenía que presentarse en días a la feria internacional I-Fest2 2020 de Túnez, la mayor de África, pero se suspende por el coronavirus. La experiencia se llevará a Madrid, por la implicación de Atlantis Aquarium y el IES Gonzalo Chacón de Arroyomolinos, donde se repetirá siguiendo el mismo método bajo la dirección del investigador Pablo Garcia.