La noche del 9 de julio, tras un cataclismo nuclear, Vila-real luchará por sobrevivir al ataque de los zombis, que invadirán las calles y espacios públicos de la ciudad. El apocalíptico escenario es el punto de partida de Last Day Zombie, una propuesta de ocio alternativo y saludable a través de un juego de supervivencia que prevé atraer a cerca de un millar de personas en su primer aterrizaje en la provincia.

El concejal de Juventud, Xavier Ochando, la edila de Economía, María Dolores Parra, y el representante de la firma organizadora, Ángel Jiménez, dieron ayer a conocer algunos detalles de la iniciativa que, antes incluso de su presentación, ha vendido ya 320 entradas a través de internet.

“Será una noche muy divertida, de teatro en vivo, yincana y participación en una propuesta alternativa que es también, y ante todo, saludable, ya que compatibilizará una noche de fiesta hasta pasadas las seis de la madrugada sin consumo de alcohol de ningún tipo”, valoró Ochando, quien destacó el “revulsivo económico” de la cita en una fecha ya estival en la que desciende la actividad general en el municipio.

De hecho, cuatro restaurantes de la ciudad serán lugares seguros, donde los participantes podrán comer o cenar, a resguardo de los zombis. H