El Ayuntamiento de Vila-real ha logrado llegar a un acuerdo con las monjas dominicas, que hasta mediados del 2009 residieron y custodiaron el convento que regentaban en la ciudad y en el que se encuentra la capilla del Cristo del Hospital, para prorrogar otros dos años --además de los cinco que ya han transcurrido-- el convenio que en el el 2011 se firmó con la comunidad religiosa, mediante el cual se donaba buena parte del edificio a la ciudad y se cedían los 3.000 m2 que ocupaba el huerto --ahora reconvertido en jardín--, a cambio de la compensació correspondiente en terrenos en otra zona urbana del municipio.

El acuerdo, que el pleno de la corporación municipal ratifica mañana, evita resarcir a las dominicas con el valor de los 15.000 m2 de techo que tiene que aportarlels el Ayuntamiento y que los técnicos municipales valoraron recientemente en unos 7,7 millones de euros. Una cantidad de dinero que generaría un importante problema financiero a las arcas municipales y obligaría a contratar un préstamo que, irremediablemente, elevaría el endedeudamiento municipal hasta rozar el 70%, muy próximo al límite del 75% establecido por ley.

El edil de Territorio, Emilio Obiol, se muestra especialmente agradecido a las monjas dominicas “por la buena voluntat mostrada en este proceso, tanto por ellas como por los intermediarios”. Y afirma que, entre tanto, “se trabaja con las religiosas para posibilitar que sus derechos tengan una resolución satisfactoria”.

Aun así, Obiol asegura que este “es el convenio que menos me preocupa, y ojalá los titulares de los metros cuadrados de aprovecamiento urbanístico a los que también tienen derechos otros propietarios tuvieran la misma sensibilidad y voluntad demostrada por las dominicas”.

Y es que son varios los conflictos que se postulan como posibles bombas urbanísticas, derivadas de la gestión del último gobierno local del PP, como de los terrenos del actual jardín de Jaume I, que podrían costarle al Ayuntamiento cerca de ocho millones. H