La Casa dels Mundina fue el escenario, en la tarde de ayer, de la gala con la que la Concejalía de Medio Ambiente pone fin al Mes de la Sostenibilitat. Una ceremonia en la que, como de costumbre, desde el consistorio se reconoció la labor de empresas, colectivos y personas individuales en el fomento de actitudes e iniciativas más respetuosas con el entorno.

Al respecto del programa de esta iniciativa, que finaliza su 15ª edición, el edil del área, José Ramón Ventura Chalmeta, incidió en que «durante el último mes, hemos puesto el acento, a través de actividades divulgativas y charlas, en cómo podemos contribuir desde diferentes ámbitos a caminar hacia un presente y un futuro más sostenibles; y qué mejor manera que culminar esta programación que reconociendo a entidades que, con su trabajo diario, colaboran en hacer de Vila-real una ciudad más habitable y amiga del medio natural».

En la gala celebrada en la Casa dels Mundina recogieron ayer el galardón de reconocimiento los representantes de Grúas Tomás --los hermanos Alejandro, Miguel y Tomás Bellido--, por su labor en favor de reducir al máximo la huella ecológica en sus vehículos. Asimismo, también se premia al agricultor Constantí Ortells por su apuesta por impulsar los cultivos biológicos, caracterizados por estar exentos de cualquier sustancia contaminante y basarse en semillas de proximidad y no modificadas genéticamente; así como a la oenegé Pankara Ecoglobal, por su trayectoria en la integración agroambiental; y a la plataforma ciudadana No más colillas en el suelo, por su implicación para mejorar el medio ambiente en Vila-real.

CAMPAÑA // Durante el programa llevado a cabo en el mes de noviembre por la Concejalía de Medio Ambiente, destaca la continuidad de la campaña de reducción de envoltorios que se ha desarrollado en centros educativos del municipio, con el objetivo de aminorar el uso del papel de aluminio o bolsas de plástico a la hora de guardar los bocadillos que los escolares llevan para reponer fuerzas a media mañana.

Para ello, se llevaron a cabo juegos participativos para incidir entre la población infantil en la necesidad de reducir los residuos de este tipo, para mejorar el entorno. Y, a su vez, se repartieron portabocadillos reutilizables para evitar los envoltorios.