El servicio de wifi gratuito que el Ayuntamiento de Vila-real puso en marcha el pasado mes de mayo ya supera con creces el millar de usuarios registrados. En concreto, y según explicó a Mediterráneo la concejala de Nuevas Tecnologías, Mónica Mañas, 1.361 ciudadanos se dieron de alta hasta principios de octubre.

Además, aquellos que cumplimentan el formulario utilizan la conexión a internet en varias ocasiones, puesto que en este tiempo ya ha habido 2.680 conexiones distintas. Así, como media, cada usuario se ha conectado en dos ocasiones.

Mañas celebró estas cifras, ya que a su entender se dieron «mayoritariamente en un periodo, el de los meses estivales, en el que el tráfico de personas baja considerablemente en la plaza Major, uno de los dos puntos wifi». En cambio, fue en el paraje del ermitorio de la Mare de Déu de Gràcia donde más usos del servicio se detectaron. El mes con más conexiones fue agosto, con 800, y le siguió septiembre con unas 600.

Estas cifras coinciden con la puesta en marcha del internet gratuito en l’Ermita, en una ampliación que se hizo «por aclamación popular», y pese a que la voluntad inicial del Ayuntamiento era probar el funcionamiento de este proyecto piloto tan solo en un punto céntrico de la localidad. De hecho, es en la plaza Major donde se registraron la mayoría de los usuarios, con 1.097 frente a los 264 del Termet.

NUEVOS PUNTOS // Antes de habilitar nuevos espacios donde la ciudadanía pueda conectarse a internet, en Nuevas Tecnologías quieren estar seguros de que, a nivel operativo, todo funcione a la perfección. Así, durante esta primera fase del servicio se han recibido numerosas propuestas de vecinos que les han llevado a introducir mejoras. «En un primer momento, hubo algún problema con la base de datos que impedía el acceso a la red, y los usuarios también pidieron registrarse no solo en la plaza Major, sino también desde sus domicilios». Es por ello que se subieron los formularios al sitio web wifi.vila-real.es y a Facebook.

La posibilidad de nuevos puntos de acceso tendrá que esperar al 2017, pese a que desde el departamento que dirige Mañas ya trabajan en la elaboración de un estudio de los perfiles de población de los diferentes barrios de la ciudad y de los posibles espacios o edificios donde podría conectarse la ciudadanía.

La primera red wifi pública de Vila-real ofrece una velocidad de navegación de 256 kb por segundo, ajustada a la normativa legal del sector. Eso sí, en el caso de las conexiones a sitios web municipales, la velocidad de navegación aumenta a 1 Mbps. H