Las bajas no dejan en paz al Villarreal en las últimas semanas. El entrenador del Submarino, Unai Emery, deberá reajustar piezas de cara al próximo partido de Liga contra el Real Betis. La visita a Elche deparó dos nuevos incidentes que agravan la situación en la parcela media.

Francis Coquelin

El mayor susto lo dio el mediocentro Coquelin, que tuvo que ser sustituido en Elche, tras recibir una dura entrada en la primera parte del encuentro, a los veinte minutos del choque, y que le impidió seguir, lo que alertó ante una posible lesión ósea en el tobillo.

Finalmente las pruebas médicas han descartado que Coquelin sufra un daño óseo y, según se apunta desde los servicios médicos del club, el jugador ya ha comenzado el trabajo de recuperación, aunque no se da a conocer fecha de un posible regreso ya que se ajustará el diagnóstico en los próximos días.

Manu Trigueros

Quien no jugará seguro contra el Betis será Manu Trigueros, al estar sancionado por acumulación de amonestaciones con lo que truncará una racha de diecinueve partidos seguidos como titular. El talaverano se había convertido en un fijo en las alineaciones de Emery.

Vicente Iborra

Curiosamente, el otro futbolista que estaba al borde de la suspensión es otro mediocentro, Vicente Iborra. Así se quedará para lo que resta de campeonato, ya que no volverá a jugar este curso por una grave lesión de rodilla.

Étienne Capoue

La baja de Iborra precipitó la llegada en el mercado invernal de Capoue, que se perdió el último partido por unos problemas físicos. Como en el caso de Coquelin, su concurso en el próximo encuentro liguero está en el aire. En caso de no recuperarse a tiempo, obligaría al entrenador a recomponer al equipo, como ocurriera el sábado en Elche, donde el argentino Foyth fue el elegido para escoltar a Dani Parejo en el centro del campo.