Gerard Moreno es una de las voces autorizadas del vestuario del Villarreal. La paralización de la competición ha frenado sus aspiraciones de jugar la Eurocopa a nivel individual y también ha supuesto un cambio radical en la vida del jugador y de la persona. La crisis del coronavirus ha instalado la incertidumbre en el mundo del fútbol después de mes y medio de paralización de la competición.

La vuelta de LaLiga también tendría una cara positiva a pesar de todo: la vuelta de Bruno Soriano. «Lo esperamos todos. Antes del parón estaba en un gran momento y la paralización de LaLiga le ha complicado la vida. Bruno está bien y se le ve con ganas de volver. Todos conocemos a Bruno, sabemos de su calidad, por lo que contar con él y verlo jugar otra vez será una gran noticia», apunta con alegría Gerard Moreno.

El delantero amarillo muestra su lado humano y de preocupación por el gran número de personas fallecidas por el coronavirus: «Para mí es inapropiado pensar en jugar con el nivel de infecciones y muertes que tenemos a día de hoy». «Debemos esperar a que Sanidad diga que se puede jugar y que las cosas están ya controladas», afirma un tanto impresionado por los efectos de la pandemia en la sociedad. De igual forma, un calendario tan apretado después de tanta inactividad no es la mejor fórmula, en su opinión, para los futbolistas: «No es fácil jugar cada tres días y será raro hacerlo en campos vacíos».

Al margen de todo, Gerard afirma que la situación en los hospitales y las cifras de fallecimientos sitúan al fútbol en un plano secundario. «Observas los contagios y las muertes diarias, y ahora mismo no se me pasa por la cabeza pensar en jugar», asevera el delantero del Villarreal.

El futbolista opina que los controles que deberán pasar para jugar deberían ser preferenciales para otra gente: «Es verdad que se nos asegura que estaríamos controlados, que habría seguridad y demás. Pero también pienso que ese control debe ser primero para la gente que está en primera línea para que esto acabe ya».

UN CAMBIO A TODOS LOS NIVELES

«Somos conscientes de que de no jugar las cosas cambiarán, pero no solo cambiará el fútbol, cambiará todo. Es una situación inesperada que afectará a todos, y si no se juega LaLiga y los clubes pueden tener problemas económicos, pero como he dicho lo primero es la salud».

El regreso a la competición traería consigo un calendario muy apretado. «Lo de jugar cada tres días no es bueno, pero contamos con plantillas amplias, pero sin público será raro», se sincera el goleador.