El 2020 tan difícil que tratamos de sobrellevar también nos da pequeñas satisfacciones deportivas. El Villarreal CF, tanto tiempo por detrás del Valencia CF, ha alcanzado en los últimos tiempos, por no decir rebasado, a su vecino. La historia es la historia --ahí no hay mucho que discutir-- pero, en las últimas temporadas, los resultados son mucho más igualados e, incluso, el Submarino ha permitido el lujo de superar a los che. Esta misma campaña, sin ir más lejos, en la que el esprint final descabalgó al Valencia hasta de la pelea por meterse en la Champions y le dejó fuera hasta de la Europa League, a la que sí regresan los groguets.

Se trata de satisfacciones meramente pragmáticas, desde el punto de vista de los resultados, pero también de otro tipo. Este 2020, la estabilidad del Villarreal y la locura del Valencia han permitido que tres jugadores se hayan decantado por vestir de amarillo en vez de con el blanco del vecino. Sí, se trata de tres casos muy distintos, pero que demuestran que, a la hora de fichar, el Submarino también puede pelear de tú a tú... e incluso llevarse el gato al agua.

ALCÁCER, EL PRIMERO

La historia arranca en el mercado de invierno, con ambos equipos buscando delantero. Pero no uno cualquiera, no para ser uno más de la plantilla, sino para mucho más. Y ahí coinciden en poner el punto de mira en Paco Alcácer. El Valencia creía que el de Torrent, por su paisanaje y por su condición de canterano y antiguo che, lo tenía todo hecho, pero ahí llegó el Villarreal para desembolsar los 25 millones de euros que pedía el Borussia Dortmund y dejar a los de Mestalla con un palmo de narices.

Nadie, ni del Villarreal, ni del Valencia, estaba preparado para lo que hemos visto esta última semana. El centro del campo titular del todavía vigente campeón de la Copa del Rey (hasta que Athletic y Real Sociedad disputen la final pendiente), de Mestalla al Estadio de la Cerámica. No solamente eso, sino al precio. De una operación que en sus orígenes ya parecía asequible por 20 millones de euros, no ha llegado a costar ni la mitad.

Dani Parejo, por quien Peter Lim rechazó, hace un par de veranos, 30 millones de euros, se ha deshecho ahora de él. Del capitán, de un hombre que llevaba nueve años en la entidad. Francis Coquelin ha terminado haciendo el camino hacia el norte, con el mar Mediterráneo a su derecha, por 6,5 millones. Sin ellos dos, sin Ferran Torres (traspasado días antes al Manchester City por una tasación también muy benévola), Mestalla se queda sin referentes... de ahí que haya clamado contra Lim.

De momento, este particular cara a cara va 3-0 para los amarillos. Un guarismo que puede aumentar, habida cuenta de la situación de ambas entidades.

RELACIÓN ASIDUA

Coquelin y Parejo pasan a engrosar la lista de más de 30 futbolistas de primer nivel que, en las últimas dos décadas, el tiempo que los amarillos llevan en la élite, han jugado en ambos equipos, cifra que no tiene precedentes en el intercambio de jugadores entre otros clubs españoles.

David Albelda, Carlos Marchena, Miguel Ángel Angulo, Roberto Fernández o Roberto Soldado no necesitan presentación.

A día de hoy, Raúl Albiol, Paco Alcácer y Jaume Costa, junto a los dos recién llegados, han pasado por el equipo che; Denis Cheryshev y Gabriel Paulista, además de Jaume Doménech, fueron groguets.

La historia de los trasvases también pasa por sus banquillos: prueba de ello es la llegada este verano al Villarreal de Unai Emery, que dirigió al Valencia durante cuatro años (entre 2008 y 2012). El actual entrenador del Valencia, Javi Gracia, trabajó en la cantera y en el filial del Villarreal.