Nadie como el nuevo entrenador del Villarreal es consciente de la importancia de que la entidad amarilla pueda cerrar a partir del 1 de enero la llegada de Vicente Iborra a la plantilla grogueta. Luis García espera que las negociaciones entre el Leicester City, el actual club del centrocampista valenciano, y el Submarino puedan permitirle tener a partir del 2019 un alter ego, situación que ya fue de gran ayuda para el madrileño en su etapa en el Levante, club en el que fue uno de los principales culpables de la eclosión del futbolista de Moncada, primero como pilar clave en el ascenso a Primera División de los granota (2009/2010) y, en la campaña posterior (2010/2011) con Iborra como gran revulsivo de la permanencia del Levante.

Hace ocho años que los caminos de entrenador y centrocampista no se cruzan, pero su última experiencia juntos confirmó que entre ambos pueden dar un espaldarazo importante a las aspiraciones de un Submarino que, primero, está obligado a escapar cuanto antes de la zona de descenso que ahora ocupa. Solo la inmediata reacción de los amarillos en los inicios del 2019 podría permitir mirar, posteriormente, a objetivos más ambiciosos como intentar acercarse a una zona europea a 11 puntos, eso sí, con el Villarreal con un partido menos, el que disputará la próxima semana ante el Real Madrid.

CALCO DE LA ACTUAL SITUACIÓN

Nadie mejor que el actual técnico del Villarreal conoce el rendimiento que puede dar Iborra como refuerzo de invierno. Tras ser una pieza vital del Levante que subió en la campaña 2009/2010, en la siguiente el conjunto granota dirigido por Luis García pagó la ausencia por lesión del centrocampista —un grave problema en el tobillo— que se alargó hasta el mes de enero. Como ahora el Villarreal, el Levante inició el 2011 en zona de descenso, incluso en una situación más delicada que la actual para los amarillos: penúltimo con 15 puntos al final de la primera vuelta.

El regreso de Iborra tras la lesión lanzó al Levante en la segunda parte de la Liga, consiguiendo la salvación con cierta comodidad: 45 puntos. En los 16 partidos que jugó Iborra esa temporada, el equipo de Luis García hizo una media de 1,6 puntos por partido: 26 de 48 puntos en juego con el centrocampista sobre el terreno de juego. Si las negociaciones con el Leicester arriban a buen puerto, Luis García tendrá mucho ganado para repetir e incluso mejorar aquellos registros.