Un puñetazo encima de la mesa, un golpe de efecto a LaLiga es el que debe dar estar tarde el Villarreal en su visita a Ipurúa (18.30 horas, Movistar+), donde se mide a un Eibar muy necesitado y que, al igual que el Submarino, atraviesa por una grave crisis de resultados en el campeonato liguero. Mientras los amarillos acumulan ocho jornadas sin ganar, los eibarreses han tocado fondo, alcanzando puestos de descenso tras encadenar nueve partidos sin conocer la victoria y haber conquistado un triunfo de sus últimos 15 compromisos ligueros.

Sin duda, el rival y el escenario perfecto para el Submarino para reconciliarse con la senda del éxito, tras haber levantado la moral, tras el varapalo ante el Valencia, el pasado jueves en Kiev, con su aplastante triunfo por 0-2 ante el Dinamo en la ida de los octavos de final de la Europa League.

Levantar la moral de una plantilla afectada anímicamente y romper el maleficio liguero, que se prolonga ya al 8 de enero, cuando el conjunto amarillo ganó su último partido de Liga ante el Celta en Balaídos (0-4), es el objetivo marcado por Unai Emery, que no quiere más despistes en los últimos minutos ni que se le escapen triunfos en la recta final de los partidos como ha sucedido ante el Granada, Real Sociedad, Elche y en el derbi de Mestalla.

CON DEFENSA INÉDITA / Para dicho compromiso, el técnico tendrá que lidiar con importantes bajas, especialmente en la defensa, donde no podrá contar con su pareja habitual de centrales, Pau Francisco Torres, por lesión, y Raúl Albiol, por sanción. Y a ello hay que unirle que Rubén Peña sale de lesión y Mario, tras superar también una lesión, todavía no ha disputado un minuto pese a tener el alta.

Es por ello que el comodín para el lateral derecho, el central argentino Juan Foyth, tendrá que ocupar el eje de la zaga junto a su compatriota Funes Mori, por lo que en el lateral derecho estará probablemente Jaume Costa, a no ser que Emery arriesgue a alinear de inicio a Mario Gaspar, todavía sin ritmo de competición.

La otra incógnita radica en la parcela ofensiva, ya que Moi Gómez descansó de inicio ante el Dinamo de Kiev, por lo que podría regresar al once inicial en detrimento de Samu Chukwueze, al que se le reservaría para ser el revulsivo en terreno eibarrés.

UN ONCE PARA GANAR / Con todo ello, el posible once del técnico de Hondarribia para romper la dinámica de ocho partidos sin ganar sería el formado por Asenjo en la portería, una línea de cuatro en defensa con Jaume Costa a pierna cambiada por la derecha --o en su defecto Mario--, Foyth y Funes Mori como centrales, y Pedraza en la izquierda. En el centro del campo parece inamovible el trivote formado por Capoue por delante de la defensa, con Dani Parejo y Manu Trigueros como interiores. Y para el ataque, el tridente ofensivo que componen Gerard Moreno y Moi Gómez como extremos y Paco Alcácer en punta. Llega la hora de dar un golpe de efecto.