Un puntazo como la copa de un Pino. No pudo ganar el Villarreal, pero sigue en racha de buen juego. Su gran problema anoche fue el Athletic, que ofreció una de las mejores versiones que se han visto en Vila-real. Tercer empate seguido en casa, pero también 18 partidos sin perder. Un excelente Submarino que jugó con ambición y buscó la victoria después del golazo de Yeremi Pino. Un punto que les mantiene en lo más alto y refuerza las magníficas sensaciones que deja este equipo de Unai Emery.

El partido empezó a diez mil revoluciones por minuto. El Athletic saltó a La Cerámica más enchufado que nunca. Eran los leones de toda la vida, el equipo correoso que pelea cada centímetro cuadrado del campo como si en el ganar un pedazo de hierba en cada acción le fuera el alma en el intento. Presión muy alta, intensidad máxima, elaboración del fútbol por los extremos, seguridad absoluta en la línea de retaguardia y arriba un delantero que anoche se convirtió en una pesadilla para el tándem central más en forma de LaLiga. El Athletic en estado puro. El Villarreal no fue menos.

Los amarillos jugaron también un fútbol rápido y presionante sobre la posesión del balón de los vascos, alternando el juego interior con los desdoblamientos por ambos carriles, sobre todo por el de Alfonso Pedraza, constituido en un extremo más desde su posición de lateral zurdo. Más control del juego por parte del Villarreal, cuando el Athletic se replegaba y obligaba al ataque estático, donde los de Garitano se sentían mas cómodos que cuando el juego transcurría sin control.

Y fue un partido de VAR. El vídeo salvó al árbitro de jugadas complicadas, sobre todo cuando señaló un penalti un tanto discutible de Unai Simón a Fer Niño, que fue anulado finalmente al visionar el colegiado la jugada. Igual que el gol de Williams a los 20 minutos, porque la salida entre las líneas del delantero bilbaíno se hallaba al límite de lo legal, pero la acción fue válida. Incluso, el Submarino sufrió un nuevo percance en forma de lesiones. Le tocó el turno a Mario, con signos de lesión en el cuádriceps.

El Villarreal ofrecía un buen nivel de fútbol, pero su problema fue que el rival salió más conectado que nunca. El partido era atractivo, intenso y con dos equipos buscando la puerta rival. Si el Athletic imprimió un ritmo alto, la salida de vestuarios de los amarillos todavía superó en intensidad a la de los vascos. El asedio fue constante, pero el empate se resistía. Fer Niño, Pedraza y Gerard Moreno dieron los primeros avisos. El Athletic vivía encerrado en su medio campo, pero en su muralla no se avistaban grietas.

El ataque a corazón abierto del Submarino traía consigo un riesgo evidente que los de Garitano intentaron aprovechar a la contra. Y Asenjo se llevó un buen susto en un remate a placer de Berenguer que se marchó fuera con toda la portería para él. El Villarreal lo puso todo: velocidad, búsqueda de los carriles y los espacios, desequilibrio, ambición, ritmo... solo le faltó un poco de precisión.

Y otra vez, Emery se la jugó con la nueva hornada de Miralcamp. El cambio lo realizó en el momento justo y la salida de Yeremi Pino fue providencial. El canario revolucionó el partido y derribó el muro vasco con descaro, velocidad y talento. A poco de salir estrelló un balón en el poste. Y en la acción posterior marcó un golazo. Aunque quiso más, el Villarreal se conformó con un gran empate.

Ficha técnica:

1. Villarreal: Asenjo, Mario Gaspar, Albiol, Pau Torres, Pedraza (Estupiñán, m.82); Foyth (Yeremi Pino, m.66), Parejo, Manu Trigueros; Moi Gómez, Gerard y Fer Niño (Chukwueze, m.82).

1. Athletic Club de Bilbao: Unai Simón, Capa, Yeray, Iñigo Martínez, Yuri, Vencedor, Vesga (Dani García, m.58), De Marco (Lecue, m.84), Muniain (Sancet, m.78), Berenguer (Morcillo, m.84) e Iñaki Williams (Raúl García, m.78).

Goles: 0-1, m.19: Iñaki Williams. 1-1, m.74: Yeremi Pino.

Árbitro: Medie Jiménez (C. Catalán). Amonestó por el Villarreal a Gerard y por el Athletic a Berenguer.

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 15 de LaLIga Santander disputado en el estadio de La Cerámica a puerta cerrada.